Continuamos compartiendo experiencias de movilidad internacional de nuestros estudiantes. En esta ocasión te contamos sobre Nallely Aquetzalli González Vallejo, estudiante de la Licenciatura en Humanidades con orientación en Letras, quien nos relata algunas de sus experiencias de trámite y estancia en la Universidad de La Coruña, España durante el ciclo 2018B.
“En general fue una de las mejores experiencias de mi vida hasta ahora. Como todo, hay cosas buenas, cosas malas, cosas que se complican”. Ella comenta que el proceso de trámite fue uno de los aspectos que más se le dificultaron. Aunque la asesoría avanzaba paso a paso, en algunas ocasiones se desanimaba al tocar el tema de la solvencia económica, así como encontrar algunos requisitos que no contemplaba, y que implicaban realizar diversos trámites para concretar su movilidad. Sin embargo, su persistencia en llevar a cabo dicho proyecto la coloca en estos momentos para hablarnos de su estancia semestral por Europa.
Dentro del proceso de la movilidad, uno de los aspectos que se deben tomar en cuenta es la afinidad existente entre el plan de estudios que se lleva en la carrera, y las posibilidades que ofrece la universidad de destino para contribuir y enriquecer el perfil del estudiante. De este modo, Aquetzalli tomó la decisión de cursar materias en la Facultad de Filología La Coruña. Ella menciona que la manera de trabajar en el aula es muy distinta a la manera en que está acostumbrada, “aquí se plantea el tema, todos debatimos, comentamos, es más dinámico. Allá es estar escuchando todo el tiempo al profesor, todo es muy teórico”. Con simpatía Aquetzalli relata que, a pesar de haber inscrito sus materias en español, una de estas tuvo que tomarla en gallego, dividida en tres bloques y cada uno con maestros distintos, lo que la llevó a esforzarse más.
Aquetzalli también señala la importancia de saber un segundo idioma, independientemente de realizar la estancia en un país en el que se habla la lengua materna del estudiante. Si bien, no contaba con el percance de la materia en gallego, el aprendizaje del idioma inglés durante su formación académica, le fue de gran utilidad al viajar a otros sitios como Londres. Uno de sus propósitos desde su regreso, es retomar clases en inglés y esforzarse más por aprenderlo.
Aquetzalli además cuenta que, la casa en la que se instaló, estaba habitada por estudiantes españolas, -más tarde se integró un chico de nacionalidad italiana-. De ellas, fue Saraí quien la recibió y de quien obtuvo mayor apoyo y orientación durante su estancia. Por otro lado, mantuvo un vínculo estrecho con otros mexicanos que también realizaban movilidad de este centro y de otras partes de la región y el país, entre ellos Carolina, Estefanía y Ramón.
De la gastronomía, degustó con frecuencia los caldos gallegos que describe como platillos “de sabores muy fuertes”, el raxo y la tortilla de patatas o española. Aunque disfrutó de todos estos platillos no dejó de extrañar la comida mexicana por lo que de vez en cuando intentaba preparar algo en casa. Por último, Aquetzalli extiende una invitación a todos los estudiantes del Centro Universitario para que no dejen pasar la oportunidad de realizar movilidad. Desde su experiencia plantea que en ocasiones hay desánimo, estrés e incluso llanto, pero siempre se tiene que pensar y trabajar para llegar al final “Creo que la experiencia de internacionalización es de lo mejor. Todo lo que requiere esfuerzo es gratificante al final”.
A t e n t a m e n t e
"Piensa y Trabaja"
Lagos de Moreno, Jalisco, 28 de mayo de 2019
Redacción: María Dolores Valdivia
Fotografía: cortesía