Con personalidades de talla internacional, CULagos celebra las Conferencias Inaugurales del ciclo 2024-B

Participaron el doctor Juan Carlos Sainz Borgo, vicerrector de la Universidad para la Paz (UPAZ) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Costa Rica, y la doctora Linda Dayán Castro Calvo, directora ejecutiva de la Fundación Kala, en Colombia

El pasado 15 de agosto, en punto de las 12 horas, se llevaron a cabo, de forma simultánea, las dos Conferencias Inaugurales del ciclo 2024-B en las instalaciones de la sede Lagos de Moreno del Centro Universitario de los Lagos (CULagos). En esta ocasión, el CULagos recibió al doctor Juan Carlos Sainz Borgo, vicerrector de la Universidad para la Paz (UPAZ) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Costa Rica, y a la doctora Linda Dayán Castro Calvo, directora ejecutiva de la Fundación Kala, en Colombia. 

El doctor Sainz Borgo impartió la conferencia «Articulación de los mecanismos de justicia internacional y reconstrucción de las víctimas» en el auditorio Dr. Horacio Padilla Muñoz, con la moderación del doctor Ray Freddy Lara Pacheco, jefe del Departamento de Ciencias Sociales y del Desarrollo Económico (DCSDE). Durante la conferencia, el vicerrector de la UPAZ abordó la historia del surgimiento y evolución de la Corte Penal Internacional, que tiene jurisdicción universal para tratar crímenes de genocidio, de lesa humanidad, de guerra y de agresión perpetrados por diversos actores internacionales en cualquier parte del mundo; también explicó por medio de qué acciones intervienen los organismos de justicia internacionales y cómo es que se imparte justicia a través de ellos. Para ello, detalló los conceptos de justicia interna —cuando se trata de delitos que pueden ser juzgados por tribunales locales y nacionales—, justicia internacional —cuando los crímenes son cometidos por funcionarios públicos de un Estado— y justicia universal —cuando se cometen crímenes de lesa humanidad que superan el umbral de justicia del Estado en que ocurren—.

El ponente detalló que existen distintos mecanismos sancionatorios que las instancias internacionales de justicia pueden ejercer en contra de cualquier actor que cometa crímenes contra la humanidad; estos mecanismos van desde llamados de atención, declaratorias de condena y órdenes de arresto, hasta, en casos extremos, el uso de la fuerza. El objetivo de todos estos recursos de corte internacional, en palabras del doctor Sainz Borgo, es evitar a toda costa la impunidad en los casos donde existen crímenes contra la humanidad, pero sobre todo teniendo en cuenta que lo preferible es que los sistemas de justicia de los Estados puedan funcionar de forma eficiente, para evitar intervenciones que podrían traer consecuencias complicadas. 

La doctora Castro Calvo, por su parte, impartió la conferencia «Derechos a la Salud, reflexiones desde los derechos humanos» en el aula magna Dr. Cirilo Medina Gutiérrez, con la moderación del doctor Jorge Hernández Contreras, director de la División de Estudios de la Cultura Regional (DECR). En su presentación, abordó el tema de los Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales (DESCA), entre los cuales se encuentra el derecho a la salud. Estos derechos, en la práctica, a menudo son considerados como de una urgencia no prioritaria, pues por encima suelen colocarse los derechos a la vida, a la libertad, a la no discriminación, entre otros. Para muestra, mencionó que países como México y Colombia apenas reconocieron el derecho humano a la salud en 2011 y 2015, respectivamente, a pesar de que la ONU los reconoce como tales desde 1948. Desde la perspectiva de la doctora Castro Calvo, en lo que constituye la esencia de su trabajo, el derecho a la salud no puede ser visto como algo secundario, puesto que la salud no es solamente la ausencia de enfermedad, sino «un estado integral de completo bienestar» que implica que las personas tienen el derecho a no ver perjudicada su salud mental, física e integral por distintos aspectos estructurales, o por contextos en los que se ejerce violencia. 

Esto significa que las personas tenemos derecho a vivir en entornos que no ejerzan violencia sobre nosotros, ya sea violencia directa —que consiste en agresiones físicas, verbales o psicológicas—, violencia estructural —que es intrínseca a los sistemas sociales, políticos y económicos a los que pertenecemos— o violencia cultural —que está ligada a aspectos presentes en nuestra entorno de manera tradicional—. De esta manera, la ponente invitó a la reflexión sobre las condiciones a través de las cuales se perjudica nuestro bienestar, y sobre la lucha que debemos llevar a cabo para garantizar las mejores condiciones para nuestra salud. 

De esta manera, y con dos conferencias centradas en enfoques propositivos en materia de ciencias sociales, derecho y psicología, fue que arrancó el ciclo 2024-B en el CULagos.

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“PIENSA Y TRABAJA”

"30 años de la Autonomía de la Universidad de Guadalajara y su organización en Red"

Redacción: Román Villalobos Manzo
Fotografías: Yesenia Campos Macías