Ambivalencias de año nuevo: la importancia de atender a nuestro diálogo interior.

 
Es común que hacia finales de año nos planteemos la llegada de una nueva etapa: por lo general comenzamos a crear expectativas y planes a desarrollar a corto, mediano y largo plazo, se trata de una suma de propósitos a lograr. Sin embargo, también observamos que en ocasiones estos se abandonan y nunca se cumplen. Al término de este primer mes del año 2019, compartimos con ustedes algunas reflexiones, que nos ayudarán a comprender las razones que contribuyen al éxito o al fracaso de los propósitos de inicios de año.
 
Lilia Rodríguez Palos, responsable del Centro de Atención Psicológica a la Comunidad del CULagos, nos brindó una entrevista en la cual se abordó la temática de los objetivos que nos planteamos con la entrada de un año nuevo, para después, conforme pasa el tiempo, notar que la motivación que teníamos para realizarlos se va frustrando y, por ende, claudicamos en el intento para llevarlos a cabo. Pareciera que realmente en el fondo no nos estamos escuchando, cabría entonces preguntarnos cuáles son nuestras necesidades elementales para sentirnos más íntegros, entendiendo que la integridad no significa ser más feliz o menos sufriente, sino con la capacidad de crecer y madurar, lo cual puede ser doloroso, afirmó la académica.
 
En diálogo, Lilia Palos se refirió al doctor Esteban Lazo, para quien el concepto de ambivalencia es fundamental para comprender el proceso del cambio; explicó qué sucede cuando nos enfrentamos a dos posiciones respecto a una situación en la que no es fácil decidir, puesto que tenemos simultáneamente pensamientos, sentimientos y actitudes contrarios en relación a un hecho, objeto, situación o persona. Comentó que este fenómeno es normal y siempre va acompañado del proceso del cambio, el cual se da cuando la ambivalencia se reduce gracias a la evocación de razones internas.
 
A su vez, la docente también expuso la importancia de la comunicación que ejercemos con nosotros, así como la existencia de un lenguaje pro y anti cambio que está presente en el diálogo interior que organiza nuestra acción y nos mantiene conscientes de nuestros valores y objetivos. Un terapeuta nos puede ayudar a evocar, articular y trabajar éste diálogo interno. Cuando nos encontramos frente a una ambivalencia utilizamos los lenguajes mencionados al mismo tiempo, no obstante, el principal obstáculo es que solemos no atender la parte pro cambio ya que el anti cambio la trunca.
 
Por último, reiteró la importancia de cambiar el eje de significación a partir del lenguaje, e hizo una invitación para abordar esta problemática a través de las pautas mencionadas, pues considera que se trata de un tema fundamental en el cual se refleja con claridad la intención así como la necesidad de tratar temas personales referentes a nuestras necesidades básicas y nuestra dignidad misma de una forma íntegra.
 
A t e n t a m e n t e
"Piensa y Trabaja"

Lagos de Moreno, Jalisco, 31 de enero de 2019
 
Redacción: David Barajas