Este martes 6 de marzo inició la V Feria de las Humanidades y las Ciencias Sociales, un espacio organizado anualmente por la División de Estudios de la Cultura Regional. En su mensaje de apertura el director del comité organizador, doctor Eduardo Camacho Mercado, hizo hincapié en el objetivo de abordar temas coyunturales de nuestra sociedad y promover la reflexión. Ahora que nuestro país se encuentra en época electoral, es importante contar con espacios como los que promueve esta feria: en los que se analice cómo influyen los medios de comunicación; cuáles son las alternativas que los ciudadanos tenemos para acercarnos a información más amplia y más veraz; la inclusión en la política de figuras nuevas como las candidaturas independientes y las dinámicas que éstas han generado. Además, la reflexión sobre cómo se aproximan los jóvenes a las manifestaciones de la cultura a través de los medios audiovisuales.
Por su parte el Rector del CULagos, doctor Aristarco Regalado Pinedo, refirió la importancia del simbolismo presente en el papel de las nueve musas durante la guerra entre los dioses y los titanes de la mitología griega. Esta alegoría sobre la historia, la poesía y las artes como fundamento de las dinámicas humanas, fue el motivo que dio paso a la declaratoria inaugural de la V Feria de las Humanidades y de las Ciencias Sociales.
La conferencia inaugural, dictada por del doctor Roberto Castelán Rueda, se tituló Urnas y fusiles. La democracia en tiempos de guerra; en ella, el doctor Castelán Rueda disertó sobre el papel que los ciudadanos jugamos en una democracia, partiendo del supuesto de que una sociedad que se rige con este sistema está constituida por individuos libres que tienen la capacidad de ejercer un rol como sujetos normativos. Al analizar cómo, en la sociedad mexicana actual, estos principios se encuentran ausentes, planteó la paradoja del ejercicio del voto en un proceso electoral; en ello, la participación ciudadana se circunscribe a la emisión de un sufragio, para luego deslindar las responsabilidades y las decisiones en los integrantes de la clase política.
El planteamiento anterior se vuelve más complejo, dado el estado de excepción que parece imperar en nuestro país. A través de ese deslinde de responsabilidades, ningún ciudadano se asume como partícipe de la guerra contra el narcotráfico, iniciada hace once años por el expresidente Felipe Calderón. Antes bien, a través del discurso cotidiano, se aprueban y se justifican las atrocidades de la guerra que vivimos, en la que la escala de violencia repercute en nuestros propios familiares y vecinos, es decir: en nuestra propia comunidad. Éste fenómeno en el que se realiza una especie de “reflexión del salvaje” y se ve al otro siempre como un enemigo, no es acorde con los principios de humanidad. La invitación del doctor Roberto Castelán Rueda se reiteró durante su conferencia a través de preguntas, siempre encaminadas a detonar la reflexión de los individuos sobre sus dinámicas cotidianas.
Por: Marina Ortiz
Fotografías: Alejandra Coss
